Kaulak

En la notable exposición de Kaulak en la Biblioteca Nacional de España, donde no podía faltar Manuel Granero y Bombita.

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Museo del Prado

La inmensidad del ser humano al servicio del arte, en el Museo del Prado, las Meninas de Velázquez, la familia de Carlos IV de Goya y la Inmaculada de Murillo.

Presentación1

TODO UN HONOR

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El Pasodoble Taurino

imagesEl pasodoble taurino como motivo musical, tiene una identidad muy definida en la estructura compositiva que forma el amplio abanico pautado. Gracias a maestros como Santiago Lope Gonzalo (1871-1906), su singularidad alcanzó límites de madurez y calidad insospechados, logrando un estatus que nada tenía que envidiar a cualquier otro estilo existente, por muy sinfónico que este fuera. ¿Y cómo puedo aseverar semejante barbaridad?, podrán preguntarse algunos, pues déjenme que se lo explique.

En un pasodoble taurino, nos podemos encontrar marcialidad, majestuosidad, armonías y contrapuntos ricos y alegres, que juguetean por el pentagrama con una sonoridad asombrosa. Pero lo que eleva al más puro grado de grandeza este género, es sin duda las melodías que componen la obra en sí, un fraseo sónico que en ocasiones parece mantener una conversación vocal. Escuchar como los instrumentos de la banda, turnan su sonoridad para reproducir las delicadas melodías tonales, es de una seducción prodigiosa, que solo se diferencia de las grandes obras clásicas, por su corta duración, lo cual supone tener que concentrar en menos tiempo, una mayor implicación harmónica.

Foto PasoA lo largo de la historia taurina, han habido plaza de toros que han destacado por sus bandas, siendo anunciadas en los carteles como un factor importante en la cita taurina, como La Popular Sansense del maestro Vallespí en Barcelona,  La Banda de Música del maestro Tejera en Sevilla o La Banda de Música de la Ventas dirigida por el maestro Lorenzo Gallego Castuera. También el pasodoble tiene partituras de una belleza embaucadora, gracias a la inspiración de genios como el citado Santiago Lope y su obra Gallito, Orozco y Ramos en Manolete, Ledesma y Oropesa para Domingo Ortega, Joselito Bienvenida de Pascual Marquina o Puerta Grande de mi estimada Elvira Checa. Estos son algunos ejemplos muy definidos de la inmensa grandeza que musicaliza El Pasodoble Taurino.

Vaya pues mi más sincero respeto, por un género musical que está a la altura de cualquier partitura que se precie.

José Luis Cantos Torres

Músico y escritor

EL LIBRO DE UN ANIVERSARIO

EL LIBRO DE UN ANIVERSARIO
“Manuel Granero Valls La huella de una vida”
Su memoria, su tiempo, su sino.
De José Luis Cantos Torres
con prólogo de Luis Pla Ventura
Publi

Centenario de Granero

En el centenario de Manuel Granero, visita al Museo de Carrozas Fúnebres de Barcelona, donde reposa la reliquia fúnebre que llevó los restos de Joselito El Gallo y Manuel Granero por las calles de Madrid, una manifestación de duelo que conmocionó España.

Desde Lima (Perú)

Muy agradecido con Jaime Arenas Mendoza desde Lima (Perú).

Sin título

Precio desorbitado

El libro CONFIDENCIAS de José Luis Cantos Torres, se cotiza a un precio desorbitado en el mercado de segunda mano.

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El Libro Taurino

imagesPartiendo de la base que la lectura de libros no está en su mejor momento, es muy posible que el libro de temática taurina, sea hoy en día, una de las obras más consumidas y con más adeptos dentro de las divulgación editorial, a pesar de que esta materia tan ansiada como querida, lleva años marginada por “grandes editoriales”, “medios de comunicación” y “sectores bibliotecarios”. Incluso en la actualidad, desde la misma cúpula táurica más selecta, aquella que sustentan empresarios, toreros, ganaderos y periodistas de “ilustre” tribuna, el trabajo literario no está valorado como se merece, algo que va en su propio detrimento, ya que sin conocer la identidad que ha laureado la tauromaquia desde tiempos inmemoriales, difícilmente se puede comprender en un presente tan fatuo y banal, algo tan onírico, sublime y elevado. Ser parte de esa cúpula, implica algo más que mirarse únicamente el ombligo.

FotoSin embargo el aficionado de solemne solera, tiene un poso especial, está hecho de otra pasta y su carácter didáctico y formativo, lo lleva a desvivirse desde los rincones más recónditos del globo terráqueo, por cualquier publicación taurina que conmueva su inquietud histórica e informativa. Parece mentira que una temática tan denostada, tenga tantos adeptos dispuestos a hacer verdaderos esfuerzos económicos, para hacerse con un ejemplar de tal o cual torero. La negación mayoritaria de editoriales convencionales por la publicación de obras taurófilas, hace que muchos escritores recurramos a la auto-edición, donde la distribución mundial es un tema difícil de afrontar sin unos cargos monetarios muy altos. Aun así, ahí están esos devotos aficionados, llenos de entusiasmo por conocer el mítico legado que tiene la tauromaquia, donde convive de manera inverosímil: sol y sombra, patrimonio y cultura, tiempos y existencias, ilusión y utopía, riqueza y ruina, o vida y muerte.

No cabe duda que el libro taurino goza de una salud fuerte, es una fuente de devoción para bibliófilos y coleccionistas, llegando a representar para muchos aficionados una reliquia perseguida y codiciada.

José Luis Cantos Torres

Músico y escritor.

Club Taurino de Pamplona

Un año más en la histórica revista del Club Taurino de Pamplona, el artículo de José Luis Cantos Torres. En este ejemplar el protagonista ha sido el célebre torero violinista, Manuel Granero Valls, “Nacidos para cumplir un destino”, un inaudito escrito extraído de la investigación que revela su libro: “Manuel Granero Valls, La huella de una vida”.

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NACIDOS PARA CUMPLIR UN DESTINO

Este año 2022, se cumple un siglo de la muerte de Manuel Granero Valls, en las astas del toro Pocapena de Veragua. Dos protagonistas históricos, que nacieron para cumplir un destino en una aterradora escena final. Una secuencia que desde las sombras más profundas de sus separadas vidas, fue dando señales silenciosas, que ambos seres acabarían unidos por una dramaturgia abominable y de consecuencias fatales. Esto que comento, para muchas personas radicalmente escépticas podría parecer una absurda barbaridad, pero en la investigación que tuve que llevar a cabo para documentar mi último libro, “MANUEL GRANERO VALLS La huella de una vida”, me demostró que nada sucedió sin ser anunciado con antelación y detalle.

Las primeras señales imperceptibles que recibió el xiquet del barrio del Pilar, fueron en formato de sainete teatral, con la obra Poca Pena que creó Ramón Asensio Mas. Su puesta en escena en el desaparecido Teatro Ruzafa de Valencia, sedujo la simpática sonrisa del joven Manolet de catorce años. Después, el funesto presagio lo representó una sombría pesadilla, que a Manolín se le repetía constantemente, donde un morlaco cárdeno con mucha arboladura (rasgos del toro Pocapena), lo enganchaba en una plaza de importancia, lo abatía y le daba una cornada en la cara, despertando del mal sueño con una violenta exaltación. Más tarde en la plaza de toros de Ciudad Real, el destino planeó sin que se supiera su primer atentado. En esa función, se enchiqueró un sexteto de Veragua donde Pocapena quedó sorteado para el torero violinista. La conjura no dio resultado porque la insolvencia monetaria de la empresa, hizo que el festejo se suspendiera instantes antes de dar comienzo. Y como si todos estos augurios no fueran suficientes, para principios del año 1922 en el mencionado Teatro Ruzafa, se rotuló en el mismo cartel y para la misma función, dos obras teatrales, una fue Poca Pena y la otra Granero-Club, una función con guion taurino.

Y tras unos años de sordos auspicios proféticos, llegó el fatídico 7 de mayo del 22. Ese día soleado y con buena temperatura, en el ruedo de la Ninfa de la Fuente del Berro, el avieso destino aplicó la despiadada sentencia de sus designios. Cuando el veragüeño prendió a Manuel al intentar dar un pase por alto, su inquina por cumplir su cometido, no pudo ser remediada por nadie. Todo su poder fue canalizado para acabar con la promesa taurina, más luminiscente que tenía el escalafón desde la desoladora muerte del Coloso de Gelves. Hasta en tres ocasiones embistió el cuerpo de Manolito, no le importó estar rodeado de hombres desesperados, que intentaron por todos los medios a su alcance, que dejase el desfallecido cuerpo de Manuel, Pocapena nació para cumplir un propósito y lo consiguió a la vista de un gentío que enmudeció de espanto.

Posteriormente a la ominosa tragedia, en numerosos y diversos recortes periodísticos, se fue revelando la sigilosa trama que unió dos nombres y un destino, aquel que acabó una tarde de mayo sobre el escenario de la antigua plaza madrileña, apagando para siempre la existencia de un torero, que había esbozado una nueva etapa de la historia taurina, donde un estilo más depurado y una maneras más estéticas, daban colorido a nuevas líneas de atención plástica.

Partitura del Book-Tráiler

La partitura del Book-Tráiler del libro taurino «Manuel Granero Valls La huella de una vida«, compuesta para violín, violonchelo y contrabajo.

Presentación

Valencia tuvo un torero

“Valencia tuvo un torero,
cuando no lo tuvo nadie…,”
Rafael Duyos
Manuel Granero Valls

Valencia

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