La verdad de Salieri y Mozart
Son infames las mentiras vertidas en la película Amadeus sobre la figura del músico Antonio Salieri (1750 Legnano-1825 Viena), todo es un vergonzoso argumento que se remonta al drama poético que creó Alexander Pushkin “Mozart y Salieri”, donde se retrata al músico italiano como una persona envidiosa y mediocre. Nada más lejos de la realidad. Está claro que el maestro Salieri no fue Mozart, pero su talento quedó demostrado cuando músicos de la talla de Beethoven, Schubert, Czerny o Liszt, fueron alumnos suyos, incluso Franz Xaver hijo de Mozart, también formó sus estudios musicales con las lecciones que impartía el músico de Legnano. Entre Salieri y Mozart existió una sincera amistad y una lógica defensa artística que para nada, suscitó de Salieri planes oscuros para eliminar o desprestigiar la obra del maestro de Salzburgo.

La Tumba del maestro Antonio Salieri en Viena
Tal cometido no fue necesario, porque entre otras cosas el de Legnano gozó de un puesto destacado en la corte, que le permitió una vida plácida y honrosa, mientras que Mozart con su carácter independiente y revolucionario, unido a su desastrosa administración económica le generó infinidad de problemas de subsistencia. De sobras es conocido que ambos músicos compusieron una obra juntos, o incluso se cuenta que para que el maestro italiano no tuviera que hacer cola en el Teatro Auf Der Wieden el día que se estrenó La Flauta Mágica, fue el propio Mozart a recogerlo. Entre las numerosas obras de Antonio Salieri, curiosamente existe un sentido Réquiem, que según el propio maestro lo compuso para él y que algunos historiadores apuntan que fue estrenado en sus funerales, bajo la batuta de su insigne alumno Franz Schubert.
José Luis Cantos Torres
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